domingo, 15 de octubre de 2006

SIETE

El síndrome de Evita esta rarita consiste en que tenga insomnio (¿mas?), me vea Redes (en la 2, la que todo el mundo ve porque es cultísimo) y al día siguiente me levante preguntándole a todo con el tropiezo lo de “¿Me estas diciendo que una ameba no es importante?” ( a poder ser con cierta nasalidad).
Y es que como siempre veo El Sentido de la Vida en versión original y sin subtítulos, y yo de inglés como que rien de rien, no alcanzo a entender, ni casi ni del todo, el porque de la existencia de ciertos preceptos morales y porque tanto pago de impuestos, aunque me temo que esto último no me lo arregla nadie ni con la mas profunda ilustración y grafitísmo del saber mundial. En fin, que todas estas reflexiones me hacen acudir a mis bien amados libros y busco en “Cocine con microondas”, “El abogado en casa”, “Nudos y ataduras para un idiota que se cree que es voluntario” (famosos volúmenes de la Enciclopedia Práctica de la Desinformación codiciados por el mismísimo Voltaire, pero es que yo llegue antes), para acabar acudiendo al “Manual del esclavo moral o buen cristiano” y darme cuenta de que, todo lo mío y lo del resto, esta recogido en una sencillísima norma que es, ni mas ni menos, que los Siete Pecados Capitales o Como Llevar Una Vida Ordenada Sin Demasiados Sobresaltos, que viene a ser lo mismo.

Llegados a este punto y dada la hora, sería prudente dejar el tema, que tengo tendencia a extenderme y al final nadie me lee. O si. Sigo.

Para entenderme yo principalmente (y si ya alguien mas quiere entenderse, pues a ello), paso a describir escuetamente en que consiste cada pecado de estos gordotes que si te das cuenta y eres dado a la observancia y a las predicciones metereológicas (no es que tenga mucho que ver, pero predecir el tiempo y acertar te eleva a la categoría de visionario o Montesdeoca de todos los Santos), mas tarde se desarrollan como preceptos constitucionales que dejaremos para otro día, porque si sigo la línea de prolegomenadas, me van a salir llagas en las nalgas de la falta de movilidad de estar sentada en esta mi silla, y para terminar decir que ya me he perdido, como es mi costumbre, y que voy a tener que releerme todo este post y parte del Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española para poder continuar.

Retomado el hilo y recuperado el carrete, ahora si, y sin mas dilación (que fíjate la seguridad que gana una con los años, que yo esta verborrea no la tenía hasta hace un par de cafés, y mira por donde, que se me han disparado las ganas de hablar y de hablar, que debe de ser la cafeína, que si son un par de cafés y que yo me lo tomo como los hombres, cortito y de un trago, pues lo menos que me puede dar es un subidón, y en vez de pegarme con el camionero de al lado por decirle guarradas a Dios sabe quien, me da por el tecleo y que si toda esta energía la utilizase yo para tranquilizarme y dormir, pero claro, no puedo dormir porqué estoy acelerada, así que tecleo, que por otra parte, también podría aprender a repuntar y así no tendría que llevar a la modista los tres pantalones que tengo en el armario para hacerle las orillas, que la muy jodida se esta montando un piso con lo que me cobra, que ha subido los precios sin avisar y ya va por casi los 10€ por orilla repuntada, pero es que es tan maja y te lo hace tan rápido que también me sabe mal llevárselo a otra, o aprender a hacérmelo yo misma, o casi no aprendo a repuntar y lo que aprendo es a teclear estilosamente o vulgarmente llamado método, que hago mogollón de pulsaciones a dos dedos y queda feo en público, lo cual me lleva a preguntarme que hago escribiendo a estas horas. ¡Coño! ¡ Los Pecados Capitales!) pasamos a comentar la jugada.

*SOBERBIA: deseo de alto honor y gloria. Pues molaría ser reconocida como gran lo que sea (ojito con lo que decimos) y que pusieran mi nombre a un par de calles y plazas, pero...LA HUMILDAD me hace reconocer que mejor que en casita que en ningún sitio, y que si alguien quiere ir al zoo que se venga aquí, que pinto monas que da gusto verme.

*ENVIDIA: resiente los bienes, cualidades o logros de otros porque reducen la autoestima. Veamos, si la guarra de la Pepa se enrolla con su jefe y al cabo de una semana la asciende con todos los honores porque la muy forniciadora tiene una boca que podría presentarse a un casting para elegir a la próxima protagonista de “Garganta profunda acepta colectividades”, ¿eso es envidia? Pobrecita, si todo eso que hace con la boca es por CARIDAD cristiana. Se merece el ascenso y mucho mas.

*AVARICIA: deseo de acaparar riquezas. ¡No te jode! Con lo que gano no me da para ser avariciosa, que mi natural GENEROSIDAD me hace darle mi dinero al del super, al de la luz, al del agua, al del gas, a la comunidad de vecinos, y un sin fin de limosnas que supongo que se me tendrán en cuenta el día que el banco me embargue.

*LUJURIA: ante el apetito sexual. Veamos, es sábado por la noche, bueno, de madrugada y estoy tecleando. Creo que queda mas que justificada mi CASTIDAD.

*GULA: ante la comida y la bebida. ¿Qué mañana me invitas a paellita de marisco? Pues va a ser que no, que la TEMPLANZA, o mas conocida por dieta solo me permite un plato de judías y pechuga a la plancha. Todo para despertar lujuria, pero en fin...

*IRA: ante un daño o dificultad. ¿Cómo que no se me nota la dieta? ¡Pero si he perdido 200 gramos en seis meses! Habrá que tener PACIENCIA, que parece que el láser ocular no te ha funcionado demasiado con tus catorce dioptrías...

*PEREZA: desgana por obrar en el trabajo o por responder a los bienes espirituales. Uuuufffffff!!!!!! Déjate, déjate,.... (voz interior: -Pues tendrás que terminar este post con DILIGENCIA). Ya...pero que sea tirada por caballos y que me lleve a la cama....


Como queda demostrado, constatado y probado que yo observo todas estas reglas y las de mi comunidad de vecinos, creo que no tendré problemas en reclamar mi parcela de cielo llegado el momento, aunque tendré que averiguar en que quincena me toca, que cuando la adquirí estaba tan pobre como ahora y la tengo en multipropiedad. Amén.

No hay comentarios: