lunes, 14 de abril de 2008

ELEANOR FITZGERALD EFFIE (MD)

Sí, queridos. Ese es el nombre que figura en mi tarjeta de visita.

Y sí, hace mil años estudié medicina, con unas notitas excelentes, en Foxford.

Me he dedicado, prácticamente en secreto, a la investigación en el sector privado, y ha sido así por qué a mi el rollito íntimo me va un montón.

Imagínenme con mi batita blanca, mis gafitas de montura azul, un decantador en la mano y un portátil en la otra. Monísima e inteligentísima, de otra forma no podría ser.

Sepan que en la investigación no todo es aburrimiento en la espera: sumen al decantador un buen rioja y unas lonchitas de orgullo ibérico y así sabrán por qué la paciencia se prestó para ser la que se llenó de estrías siendo la madre de todas las ciencias.

Les cuento todo esto por qué es mi deseo que lo sepan y por qué me llena de orgullo y satisfacción comunicarles qué, a raíz de mis últimas investigaciones publicadas, me ha sido concedido un premio. Ja. La dotación del premio consiste en un plato de higos, un organillo y una cabra. Nada en absoluto despreciable, oigan. No tienen más que mirar las cotizaciones en bolsa de los higos. ¡Y no vean como se están poniendo las cabras!

Bien. El estudio por el que he sido premiada se titula “Troll, sexualidad y otras cosas del azar”. Parece un título banal, lo sé, pero puede que sea el estudio más serio que se haya realizado sobre el asunto (si es que se ha realizado algún estudio sobre ello hasta ahora).

En estos tiempos de modernidad y desarrollo, de apretujones de horario, de bífidus activo y de dieta del melocotón, las relaciones sociales han quedado reducidas a prácticamente nada. Y entendamos relaciones sociales a las ejecutadas a la antigua usanza. ¿Recuerdan aquellos guateques tan estupendos donde no faltaba nunca José Luís López Vázquez? ¿Sí? Pues son Ustedes muy mayores o mienten fatal.

O son como yo, que han nutrido su cerebro y su curiosidad con las maravillosas películas del Landismo.

Como decía, la falta de tiempo ha hecho que cambien nuestras costumbres a la hora de sociabilizar y estrechar lazos con nuestros congéneres. Personalmente, yo soy de esas personas que sube en el metro en hora punta para poder llevarse algo a las manos, a la cadera y a la nalga, pero no olviden que yo soy una científica. Lo que prima en la actualidad es montarse un blog y ligar como un cabrón por esos lares. Y sí, se puede. Se establece una relación que puede llegar hasta donde a uno le apetezca entre bloguero residente y comentarista. Pero he aquí que aparece un subgénero de adulador: el tocapelotas o más conocido por los parroquianos por Troll.

El Troll es un tipo que se aburre, que siente cierta envidia por la popularidad del bloguero, o que le molan sus tetas, o a saber.

Y es aquí cuando llegamos al asunto de la sexualidad.

Al bloguero profesional no le supone ningún tipo de molestia por qué, en su eterna sabiduría, entiende que tener un troll significa:

1.- Que es un puto mito. (Como Ak)

2.- Que escribe cosas tan interesantes que no puede evitar que un elemento impertinente se muera por su cerebro. (Cerebrooo, cerebrooo)

3.- Que es tan incendiario lo que escribe que necesita un bombero de la moralidad con urgencia.

4.- Que está tope bueno/buena. (Como una servidora)

5.- NS/NC (Como la mayoría de la blogosfera)

Entonces es cuando el bloguero se anima, la tensión se le normaliza, el colesterol le baja, se le riza el pelo y el pito se le pone como el pedernal.

Y ahora el azar:

Quiera el azar que salte a la palestra un comentaristo/comentarista súper-ofendido por lo que dice el Troll contra su bloguero favorito. Al defensor, por esta causa, le sube la tensión, el colesterol se le dispara, se despeina y el pito se le arruga hasta el nivel de “búsqueda y captura”. Entabla una sangrienta batalla dialéctica con el jodidito invasor y he aquí, ooooohhhhhhh diosito, que el administrador del blog invadido le escribe una cartita privada al aguerrido defensor agradeciéndole todo su arrojo y desparpajo para defender la virtud de la dama o damo en cuestión. El colesterol, el pito, la tensión y el humeante teclado vuelve a la normalidad. ¿El azar en todo esto? Pues que resulta que es el vecino/vecina buenorro de tu finca y le pegas un polvo en agradecimiento.

Respecto al Troll, vuelve y vuelve hasta que se cansa, que lo de contestarle es igualito que hacerle una paja a un muerto: nunca tiene fin.

Yo, en cuanto cace a mi Trolito, lo disecciono y lo envío al museo de Onda.

24 comentarios:

Anónimo dijo...

Deme un cacho de carne, algo que pillar, su dialéctica me confunde, necesito algo claro, un tópico, el que sea, yo luego me contraposiciono y troleo a saco.

El Pejetroll deslogueado...

Hyku dijo...

Virgensanta!!
Trolls por ahí y el Ayuntamiento sin cerrar las puertas del zoo...Ah, que si las cierran no pueden volver los concejales? Joder, que se fastidien por una vez...

Enhorabuena por el premio, que como mínimo le deseo que sea de consolación ;-)

Besos como un pedernal

Anónimo dijo...

Si, claro los premios siempre son bien recibidos, ya sea un chorizo caducado, que un higo bien verde, sobre todo si aún son comestibles, que la economía no está ahora como para hacer ascos a un bocadillo de mortadela, de esas que llevan olivitas de esas tan ricas, arggg... Y si pillas al troll y te lo quieres merendar, cuenta conmigo que tengo un hambre....
no gusta tuku!! soy un solete

Anónimo dijo...

Pues si hay que trolearse, pues nos troleamos todos, oiga. Trol trol trol la botella de trol, con permiso de la Srta. Akroon que prefiere un gintonic de bombay safir.

Si es que uno es imbécil hasta para esto.

Peggy dijo...

lo confieso , a mi , con ciertos personajes me gusta ser un troll, eso de descontrolar al personal es tan morboso ....aunque lo de un hoygan tampoco esta mal .....

Doris primaveral :)

Akroon dijo...

Sr. Anónimooooooooooooooooooo... bueno, oiga, que si tiene a bien ponerme el gintonic de otra marca de ginebra, yo por mí, encantada... A sus pies.

Effie, linda flor del jardin;

Tener un troll es gracia divina, es ser espejo de masas, es estar en el ojo del huracán... pero la fama es efímera, y los trolls se acaban yendo. Snifffff

Yo, si no es menester, no me pondré a repartir jostiazos, que me puedo romper una uña. Por contra, si me lo pides tú, me liaré a mordiscos con quien haga falta, sumándome a la batalla (y si puede ser, que el traje de batalla sea sexy, que lo cortés no quita lo valiente).

Lo dicho: disecciona tu troll y vayámonos a Onda a verlo expuesto!

Eres un puto mito, de eso no cabe duda.

Anónimo dijo...

Hmmmmmmm... batita blanca, gafas a media nariz, vino... hmmmmmmmmm




Perdón, disculpe, por un momento me he distraído en pensamientos nada puros.

Oiga, yo la defendería a capa y espada dónde hiciera falta, aunque tengo la ligera impresión de que no es Usted una damisela a la que salvar de nada. Por contra, me ofrezco para hacerle la compra en el super y colocarlo todo en el frigorífico, pero solo si me deja preparar la cena y hacerle un masaje en los pies.

Y sí, yo soy un adulador (pero el mérito es suya, mi querida Effie... si no, haber nacido fea y tonta), pero me he examinado detenidamente ante el espejo y no tengo pelo situado en extrañas partes del cuerpo ni me cuelgan los mocos en hilos sin fin. Eso tiene que querer decir que no soy un trol, ¿no?

Suyo completamente,
Eduardo

Srta. Effie dijo...

Sr. Anónimo deslogueado,

Veamos.

Con trolazos de su nivel, es dificil decir algo para que Usted se contraposicione.

Lo máximo que se me ocurre en el asunto de la carnaza, es decirle que el bocata de mortadela es cojonudo con pan del día y con mortadela sin aceitunas. El chorrito de aceite es opcional.

¿Eso le sirve?

Srta. Effie dijo...

Sr. Hyku,

Recibo sus besos de pedernal y los pogo fuera del alcance del grueso de los libros: es que el muy cabronazo me los roba.

¿Que tal su ataque de celos?

¿Ya le han salido chancros?

¿Adicción al corcho?

Joer, como me pone.

Besos.

Srta. Effie dijo...

Anónimo tuku solete,

¡Pero que rarito que es Usted!

Fíjese que me hubiese gustado discutir, pero veo que opinamos lo mismo respecto a las aceitunas y la mortadela. Esto solo nos puede llevar, a Usted y a esta servidora, a la conclusión de que para merendarse a un trolito, previamente hay que rellenarlo con mortadela.

¡Que complicada que es la vida!

Srta. Effie dijo...

Anónimo Imbécil,

¿Un trol se balanceaba en una tela de araña?

Toque la guitarra, coño. Y a mi me sirve Tanqueray.

Srta. Effie dijo...

Querida Doris,

Usted, le guste o no, descontrola al personal con su simple presencia.

Y Señora, jamás será un vulgar troll:
Usted utiliza argumentos válidos y no acude al insulto fácil.

¿Primaveral? A mi los mocos me llegan al cerebroooo.

Srta. Effie dijo...

Mi querida Ak,

Sip.

El tener un trolito es lo que tiene.Yo he tenido un par de trolls, y de mal que les he caído, se han traumatizado y no han vuelto. En el fondo echo de menos tener un policía de la moralidad rondándome.

Y no confundamos los términos: tú eres un mito, y yo, un mico.

¿De verdad que te jostiarías por mi a bocado limpio?

Sí es que eres el novio ideal, recoños.

Srta. Effie dijo...

Sr. Eduardo,

Hum.

Parece que se abre la ronda de negociaciones.

Me dice que está dispuesto a hacerme la compra, guardarla en el frigorífico y hacerme masajitos en los pies.

Verá, yo eso ya lo tengo. El afortunado (sí, es afortunado), al que llamaremos H-S, incluso me trae el desayuno a la cama y me friega los platos. En una ocasión me lavó el pelo mientras nadábamos en mi bañera.

Es evidente que no soy una princesita desesperada de las que pululan (y copulan) en la red.
Más evidente es mi belleza y mi inteligencia.

Querido, que capacidad la suya de observación.

¿Tiene algo más que ofrecerme?

Anónimo dijo...

Hola... Srta. Consultora sentimental, tengo un pobemilla... pero me da venguenza.... no se por donde empezar... a ver... beno y soy una buena mujer... tengo 88 añajos... y que no se ria naide, ¿eh?, soy de un pueblecico del norte de extremadura, pa se mas exacto de caminomorijco, es rebonico, jeje, beno, te escribo dede el unico aparatejo que hay en mi caminico, es del cura, tene intene y tene fotos raras... mi pobema es que mi maridico me molesta muso, me dice que como no le haga cosicas benas se va con mi vecina dalao, y tego miedo a que me se valla, ¿será por que no le gutan mis abichuelillas? la maruja me dice que me salen mu arrugas... no se...
muchas gracia si me contestas
ayy eres muy rebonica, en mi pueblo al juanico le gutas te manada besicos

Davito dijo...

Queridísima Effie:

¿Soy yo el único que ve que su troll sigue ahí? Por favor, dígame que hay más gente en mi caso.

Atentamente, Davito.

P.D. Quiero fotos de la disección. ¿Qué pasa? Tengo mi puntito "gore"...

Chafardero dijo...

Mis más sinceras felicitaciones por el merecido premio, Srta. Effie. Confió en que sigan subiendo la cotización de los higos, a ver si al menos se puede pagar un masaje de pies.
Enterado de su intención de abrir un consultorio sentimental-sexual, no puedo resistirme a trasladarle un problema que me tiene en un sin vivir. Como ya sabrá usted, hace unos meses que bebo los vientos por una vecinita por la que padezco, peno y muero. Después de muchas zalamerías y requiebros, cartas de amor y serenatas con la tuna de veterinaria, ha accedido a concederme una cita. Bien sabrá de la importancia de esta primera cita para el buen curso de nuestro amor, pero una duda me corroe: debo ponerme tanga o boxer para este primer encuentro. Descartado el calzoncillo de pata larga que solo va bien para ir de fiesta con los amigos, o el clásico estilo Homer que uso solo en entierros y comuniones, será el tanga demasiado atrevido?, pensará que soy un pijo redomado si me ve con bóxer CK? Aconséjeme, Effie querida, mi felicidad está en sus manos.
Un capricornio enamorado

Borde dijo...

Disculpe usted por meterme en una consulta a la que no he sido llamado, Sr. Chafardero, pero ¿en la primera cita ya muestra usted los calzoncillos?

(Acabo de descubrir ante la audiencia que estoy/soy mayor).

Chafardero dijo...

En cuestión de amores, cuanto antes descubra uno sus cartas, mejor que mejor, Sr. Borde

Srta. Effie dijo...

Sra. Del Norte de Extremadura:

En breve me ocupo de su caso, querida.

Srta. Effie dijo...

Sr. Davito:

Me temo que Usted es el único con privilegiada visión para apreciar determinadas cosas.

Por supuesto que Usted será el primero en ver fotos de la disección… si se da el caso.

A sus pies.

Srta. Effie dijo...

Sr. Chafardero:

¿Capricornio?

En cuanto arregle el caso de la señora extremeña, le aclaro sus dudas.

Srta. Effie dijo...

Sr. Borde y Sr. Chafardero:

En este blog, esas pequeñas discusiones se arreglan, para mi placer, en el barro.

Chafardero dijo...

Si tengo que defender mis ideales con el barro al cuello, sea. ¿Pero en tanga o en bóxer?